Más plano, más rápido, más justo: cambios operativos para una organización más plana

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     Si las jerarquías de estilo tradicional ya no son apropiadas para nuestro mundo en rápido cambio, ¿cuál es una alternativa operacional realista? ¿Cómo podemos hacer que las organizaciones sean más planas y al mismo tiempo asegurar la velocidad del flujo y el trabajo significativo de una manera justa? ¿Y cómo lograr una organización más plana operativamente?

Comience con la mentalidad correcta
La mentalidad con la que los líderes y gerentes deben equiparse para la Era Digital es un sistema completo que comprende el trabajo basado en:

1. Entregando bienes y servicios de calidad: esto se puede asegurar diseñando las interdependencias correctas, gestionando la variación para construir procesos confiables, escuchando al cliente a través de comentarios y mejoras continuas;

2. Participación significativa del personal basada en interdependencias bien diseñadas y manejo de la variación en las interacciones humanas a través de «emociones inteligentes», transparencia y acuerdos de beneficio mutuo;

3. Velocidad del flujo: esto se puede lograr a través de un diseño sistémico efectivo de la organización que permite que los procesos y la comunicación fluyan sin obstáculos artificiales. Proponemos un modelo de «Red de proyectos» donde el flujo puede acelerarse mediante la identificación de un «punto de apalancamiento» (restricción) en la organización.

4. Innovación continua: esto significa suposiciones continuamente desafiantes para comprender cómo satisfacer mejor las necesidades del cliente. Este es un proceso que se puede aprender.

Optimizando recursos a través de una red de proyectos.
Ya sea que queramos mejorar la velocidad con la que fabricamos productos, instalamos nuevos equipos, organizamos envíos o archivamos cierres trimestrales, necesitamos los esfuerzos coordinados de muchas competencias diferentes. Si queremos optimizar verdaderamente nuestros recursos, necesitamos hacer el mejor uso de las competencias que tenemos disponibles. Una organización puede administrarse de manera mucho más efectiva, entonces, cuando la vemos no como una matriz funcional y lineal, sino como un conjunto de competencias. Podemos considerar que nuestros ingenieros, contadores, científicos y expertos en la materia no se limitan a una «función de la empresa», sino como competencias valiosas que pueden implementarse para el objetivo de toda la empresa. Estos recursos, TODOS los recursos, deben estar disponibles para cualquier «proyecto» que la empresa deba cumplir.

Cuando adoptamos la visión de la organización como un conjunto de competencias para ser programadas en una red de proyectos, no solo podemos dirigir una organización más plana, sino que podemos liberar el potencial de todos los recursos disponibles. Adquirimos un nivel de flexibilidad sin precedentes y podemos acelerar el flujo de la finalización del proyecto. Esto acelera el logro del objetivo general de la organización.

Nos paramos sobre los hombros de gigantes.
La metodología de gestión de Decálogo integra el trabajo de dos gigantes de la administración, el Dr. W. Edwards Deming y el Dr. Eliyahu Goldratt (Teoría de las restricciones) en un camino coherente para diseñar y administrar organizaciones como sistemas sin silo. Operacionalmente, todo el trabajo de una organización se organiza en procesos o proyectos repetitivos de varias dimensiones. La «jerarquía» ya no es vertical; Una organización más plana se basa en la responsabilidad de esos proyectos.

La tecnología ayuda
Toda empresa de hoy es una empresa de tecnología. Nos basamos en la tecnología para ayudar con nuestro trabajo diario y objetivos generales. La tecnología solo tiene sentido cuando es un facilitador.

 

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